Algo parecido ocurrió a finales de los 60's cuando se dio el "baby boom" de aquel periodo aperturista y esperanzador, los poblados de colonización y la entrada de la democracia tiempo después. Esto dio paso a la emigración de muchos en nuestras familias para poder alimentar a su prole.
Fueron al norte de España y Europa, a Alemania, Bélgica, Suiza y Francia, pero gran parte se quedó en nuestro país, en un rinconcito de Cataluña llamado Sardañola, en catalán y oficialmente: Cerdanyola del Vallès. Allí encontraron ese respiro económico que les hizo florecer, aunque siempre añorando esta tierra. Sus hijos y nietos siguen regresando en cuanto pueden a su pueblo cada año o en más de una fecha del año porque sus padres y abuelos les hablaron de su verdadero y querido origen.
Rezaba un dicho muy célebre por entonces: "Entre Sardañola y Parrito, tienen a Peñaflor frito" en referencia al dueño de aquel gran comercio de Palma del Río (que vendía al por mayor quitando la venta a nuestras tiendas del pueblo) y a la emigración a Cataluña (que se llevó a gran parte de la mano de obra joven de Peñaflor).
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