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domingo, 25 de octubre de 2020

El libro de una vida: José Milán Jordán

Hay entradas de este blog muy importantes, tanto como una vida entera de recuerdos, y me siento un privilegiado por poder hacer de altavoz de tantas historias que son tan nuestras...

Cada peñaflorense es un eslabón importante de la historia general de nuestro pueblo, y sus vivencias un tesoro antropológico que conservar. Por eso os pido que grabéis, escribáis, registréis y recordéis todo cuanto podáis. Yo ahora me siento enormemente orgulloso de haberlo hecho con mi abuelo Lorenzo, a quien escuché atentamente cada historia y grabé algunas canciones y poemas de su infancia (alguno os he puesto aquí).

Hoy os traigo una de estas joyas en forma de memorias, ofrecida a nuestro blog por la persona que más ha querido su autor, su mujer, con quién he tenido la suerte de contactar y apreciar la devoción que profesa a nuestro protagonista, José Milán Jordán, su marido. 

Nació el día de Santa ana de 1940 (en plena posguerra), hijo de Benito Milán y María Jordán. Cuando llegó con su famillia a Peñaflor, vivieron por primera vez aquí en "la casa-cueva de Tio Ángel" y su padre trabajó en el cortijo de Parias. Con el tiempo a su familia les conocieron por el apodo "Socavón" por el lugar donde vivían.

 

Os podría poner por delante algunas de las fotos de sus recuerdos, aunque todas y muchas más están dentro del libro completo de sus memorias que os traigo hoy. Merece la pena leerlo con detenimiento.

Es a su "medio tomate" (como leeréis en las memorias), Mari Carmen, su mujer, a quien tenemos que agradecer esta emotiva y fascinante entrada de blog.  Tuvo que ser una emoción poder leer cada pasaje de esta historia por primera vez. ella me cuenta que el deseo de este gran hombre era que se conocieran sus vivencias. ¡Qué mejor lugar para que sus paisanos lo lean que en LA MEMORIA DEL CUCO!

Como en este libro, queremos conocer vuestras historias, seguro con momentos tan apasionados como el de los capítulos que habéis leido en la vida de José "Beni" Milán Jordán.

¿Os atrevéis a contárnosla?

 

sábado, 17 de octubre de 2020

Diccionario Cuco VI: La riqueza de nuestro lenguaje (trincar y endiñar)

 No quiero pensar en cómo intenta apreder español un extranjero y, cuando viene a probar su aprendizaje, se encuentra a un andaluz de a pie empleando expresiones hechas tan nuestras, refranes cada dos por tres o decenas de significados para una misma palabra. Si al susodicho extranjero no le da un "yuyu", poco le falta. Pero este hecho responde a la complejidad de nuestra sociedad sureña, al emplear el lenguaje oral tanto y tan económicamente. Véase "ancálabuela" y el "noniná".

Hoy os traigo dos palabras (verbos) que pueden ser opuestas pero que tienen "to el arte". Hablo de "trincar" y "endiñar":

Si trincar puede significar agarrar o coger-jalar (para no confundir con el "coger" de Sudamérica); endiñar es soltar o dar.

Si trincar puede ser sinónimo de robar, endiñar puede ser de donar y añadir.

Pero esto no queda aquí, porque por sí solos estos verbos son mucho más:

Trincar es en Peñaflor también pillar o sorprender haciendo algo indebido o mal visto. También es beber algo de un solo trago o totalmente. Ej: Lo trincaron desprevenido robando en la tienda. Ej2: Se trincó solo la botella entera de ron.

Pero el significado que más me gusta de este verbo en Peñaflor es trincar cómo cerrar o echar el trinquete, el cerrojo. Algo parecido a atrancar- echar o poner el tranco. Entonces un ejemplo, sería: "Trincó el cerrojo y ya no abrió más esa puerta."

También parecido a este significado y usando un símil es "trincar la puerta" por "salir de paseo o de fiesta": "Trincó la puerta y no volvió hasta la mañana siguiente de la feria".

Endiñar, sin embargo lo usamos los cucos para decir algo más que dar, donar... Lo usamos como golpear o dar una paliza. Ej: Le endiñó bien y no le dejó escapar." o "Los luchadores se endiñaron mutuamente porque eran igual de fuertes."

También como dar una "paliza" a nivel deportivo. Ej: le endiñaron un 5-0 en el partido de fútbol.

También nos funciona endiñar como dar algo, pero que no queremos o necesitamos "colocar" o "endosar" por algún motivo o engaño. Ej: Le endiñó el coche con la avería que tenía y no se dio cuenta. Ej2: Le endiñó un anillo de bronce por el mismo precio como si fuera de oro.

Otro significado propio e interesante es el de encalomarse, auto-invitarse a un evento o sin ser llamado. Ej: Juan se endiñó a nuestro grupo del día de Almenara sin pagar un euro.

Ante todos estos significados solo me queda trincar la entrada y marcharme antes de que se me ocurra endiñaros otra opción más... Jejeje. ¿A alguien se le ocurre alguno otra?

sábado, 10 de octubre de 2020

Aquellas fotos coloreadas

 Hoy en día la tecnología avanza a pasos agigantados en menos de una década, dejándo obsoletos aparatos antes de que aprendamos a usarlos por completo. Lo que antes era la vanguardia ahora es pura chatarra, los teléfonos móviles son casi inservibles en dos años...

Pero en el mundo de la imagen y fotografía, por mucha calidad que nos puedan ofrecer las cámaras e incluso los smartphones, no hay nada como el romanticismo de las fotos antiguas. Ya no solo en el papel original (con su característicos olor y textura) sino en aquel color sepia o blanco y negro que las hacen tesoros tan especiales tras tantos años en la vieja "caja de latón de la carne de menbrillo" del cajón de la "cómoda" de la abuela.

Hay en internet multitud de herramientas descargables y on line que mejoran y restauran fotos digitalizadas, incluso que interpretan el color de fotos que siempre han sido en blanco y negro. Es verdad que no siempre consiguen el resultado óptimo, pero en la mayoría de los casos son capaces de captar matices y detalles que no se veían bien en la foto original.

Pero antes, colorear una foto era interpretar (literalmente el color) sobre la propia foto a blanco y negro o directamente en un lienzo, con pincel y mucha imaginación. Así podemos encontrar a veces fotos en gruesos tableros y daguerrotipos de cartón a los que se les ha sumado el color.

Aquí algún ejemplo:

Esta foto coloreada así con pìncel sobre madera es una celebración en los años 50's en Peñaflor. 

En ella aparecen, de izquierda a derecha:
La niña con vestido a cuadros es Pepi Dantas, y sobre ella está Rosa Sánchez Corredera, el resto de niños a su lado no sabemos con seguridad sus nombres, el hombre con la chaqueta rosada (poco probable ese color) parece ser Antonio Cruz Rodríguez, a la derecha asoma la cabeza Antonio Fernández Danta y Antonio García. A la derecha están Sebastián Sánchez Hidalgo (marido de mi tia Teresa Fernández Dantas) y su cuñado Lorenzo Fernández Dantas en la adolescencia.
En primer plano está fumando un puro Juan García junto a sus Francisco y hijos Sebastián. De esa familia faltan la mujer de este, Anita Mallén y su hija Rosalina. Junto a él aparece Rafael Carranza "el del teléfono".
 
Aquí otro ejemplo de coloreado a mano de fotos antiguas. Mis abuelos Lorenzo y Balbina en la feria a caballo a principios de los 50's:
 
Ya hace unos años empecé a explorar las posibilidades de programas de retoque fotográfico e internet para restaurar fotos y comencé por una de las más antiguas que conserva mi familia. Este señor es José Joaquín Dantas de Brito, mi tatarabuelo nacido en Viana do Castelo (Portugal) y padre de toda la familia Dantas de Peñaflor. Os muestro el antes y después de esta foto de carnet. Esta foto puede tener cien años.

Con los programas on line que ofrecen varias páginas webs, como la de genealogía "MyHeritage", he conseguido recuperar a color algunas más:
Esta foto de la calle nueva, a finales de los 50's, ha quedado muy bien recuperada a color. La niña pequeña en primer plano a la izquierda es Paquita Muñoz, Madre del historiador Jose Francisco López Muñoz. En el centro de rodillas mi tia Teresa Fernández Dantas con varios niños de la calle y tras ella su hermana Loli muy joven con vestido oscuro.  


 
En la siguiente está mi familia materna en el corral de la casa de mi bisabuela Ana Mármol Bertolet en la calle Federico García Lorca, antiguo C/ Guerola. Mi abuela María Cruz Rodríguez junto a sus hijos Enrique Domínguez Cruz, Ana Mª, Conchi, Manolo y Juani y sus sobrinos Pepe y Juani Asenjo Domínguez. Sentada mi bisabuela y al fondo mi tio abuelo Adrián Asenjo.

 
 
La siguiente foto interpretada que os traigo es una murga de carnaval de los 50's. 
Se aprecian gran número de detalles y parece bien coloreada dentro de las posibilidades.

Esta última foto se explica casi sola y es sacada de una publicación muy significativa para nuestro pueblo a principios del siglo XX. 1904, se descubren los crímenes del huerto del Francés y el autor huye. Es interceptado por gran número de personas que van en su búsqueda, siendo capturado finalmente en la finca Frajimón, cerca de la ermita. Aquí traen a Juan Aldije "El Francés" para ser apresado y juzgado dos años después a morir por garrote vil junto a su socio Muñoz Lopera.
Foto coloreada por nuestro buen amigo Juan josé Toribio (La Puebla de los Infantes).
 



Desde luego, se abre un campo maravilloso en la recueración de recuerdos pero, como muchas otras cosas, vale más aquella idea del momento exacto en que vivimos aquellos momentos y la ilusión con que lo hicimos que cualquier interpretación tantos años después.
Juntaros, abrazaros y recordad algun momento especial que vivisteis juntos en el pasado: ese patrimonio es tan especial como propio. El bien más preciado.

domingo, 4 de octubre de 2020

Una ida como nunca... una esperanza de vuelta

 Como todo lo ocurrido, este año será totalmente diferente. Así, la vuelta de Nuestra Patrona a su casa, la ermita, no podrá ser como se viene haciendo cada primer fin de semana de octubre. 

Pero para las personas de fe, puede ser el símbolo de que se va para volver en la próxima romería, de forma plena, si por fin llega la sanación mundial con la vacuna.

Hay que pensarlo y creerlo así, y ahora toca ser responsables para vivir intensamente esos momentos que vendrán más pronto que tarde.

Hoy, domingo 4 de octubre de 2020, recordamos aquellas otras vueltas de Ntra. Sra. de Villadiego desde nuestra Iglesia de San Pedro Apóstol (su segunda casa) hasta su lugar de culto, en la Ermita de la que es titular, tras su habitual Novena.

 

La primera es una foto ya mítica de este blog, donde podemos ver a mucha gente de nuestro pueblo que ya nos falta y el bonito paseo de vuelta por la carretera de Sevilla. en los años 60's.

A medidado de los sesenta, en la avenida de Sevilla, de camino de regreso a la ermita. Entre los que acompañan a la Virgen están: Emilia Ruiberriz, Manuel Meléndez, Polonio "el Cartero", José Parias portando la bandera y Octavio (alcalde). Delante Rosa Martínez y su cuñada. Detrás Manuel "el del Chalet", Juan Palomo, Anita con su hijo Pedro, Manolo Domínguez "el Municipal", Belén la madre de Alejandrín, Paulita, Mari Carmen Fernández y su hermana Adela, Antonio Martín con sus hijos, Carmelo, el padre de Juan de Dios, Manuel Linares "Palaustre" y Mercedes, entre otros.

 

En octubre de 1982 ya en la ermita se fotografían junto a Ntra. Sra, de izquierda a derecha: Rosalina e hija, Antonio Lorilla y su mujer, Aurora Carrera, Elena y su hija, Mari Carranza, Juanita, Carlota Meléndez y su hermana, ambas hermanas de Paqui la de la farmacia, Sebastián Carranza y su hijo y Antonio Melero. Al fondo la suegra de Juan Recio. 

La tercera foto nos la ofrece Manuel Genicio "Patrana" sobre una vuelta ala ermita de los años 80's.

 

Están Pepe Loreto a la izquierda y Felix Saez en el centro junto a otro devoto que parece ser Luis Pérez Dantas, aunque no estoy seguro... a los pies de la virgen en aquella vuelta a la ermita.

Recordar para seguir, encontrar en aquellos momentos las fuerzas para vivir el futuro. Así será una ida de esperanza para un vuelta triunfal. 2021 debe ser el año en que todo vuelva a fluir, se renueve la fe y triunfemos.