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domingo, 23 de julio de 2023

30 años no son nada: Aquellas plazas del ayuntamiento

 Estamos ante una nueva realidad en cuanto a la provisión de plazas de personal trabajador de nuestro Ayuntamiento, ya que ha llegado el momento en que se lleve a cabo el proceso de Estabilización de empleo temporal que desde Europa vienen achacando a la administración española. Un proceso que prevee fijeza para todo el personal laboral y funcionario de los ayuntamientos que aún no lo fuesen y además lleven trabajando en ellos "en fraude de ley" durante mucho tiempo.

Hace 30 años justo se llevó a cabo otro proceso similar, cuando se crearon nuevas puestos de trabajo en este ayuntamiento y donde algunos peñaflorenses comenzaron su andadura como trabajadores fijos en él. 

En concreto en resolución de la convocatoria del 8 de octubre de 1992 se requirieron las plazas: Un Policía Local, un Auxiliar Administrativo como funcionarios y ocho laborales indefinidos entre los que estaban un Graduado Social, un Asistente Social, un Auxiliar de Biblioteca, tres Limpiadoras, un Electricista y un Operario de Ayuda a Domicilio.

En esta foto aparecen Juan Díaz Muñoz (Auxiliar de Biblioteca), Mª Ángeles Naranjo Escriche (Graduada Social), Lorenzo Fernández Martín (Electricista), Pili Zafra (Auxiliar Administrativo), Manolo García (Policía Municipal), Ana Genicio (Limpiadora), Mercedes __ (Asistenta Social), Isabel Rodríguez (Limpiadora), Carmela Mármol (Limpiadora) y María José Viñuela (Operario de Ayuda a Domicilio). También están el secretario por entonces, Francisco Sánchez Nieves, y el alcalde Moisés Ruiz.

Fotografía aparecida en la revista de feria de Peñaflor de 1993.

viernes, 21 de julio de 2023

Nuestro patrimonio menos conocido. Los Retablos: Retablo de Ntra Sra. del Monte Carmelo

 El pasado 16 de julio tuvo lugar la onomástica de la Virgen del Carmen, una advocación mariana que hoy en día no resuena en Peñaflor, pero que antaño, tuvo gran repercusión como hermandad, como muestran las reglas propias que aún se conservan en el archivo parroquial de San pedro Apóstol. Esta hermandad, como muchas otras, acabó por reunificarse con las principales del pueblo, como la de Ntro. Padre Jesús Nazareno.

Sin embargo, aún conservamos parte de su patrimonio artístico en forma de retablo, la imagen de su titular y algunas piezas anexas.

Este patrimonio es obviado por desconocimiento, pero como siempre digo, no sabemos la valía que tenemos entre manos, que conservamos en nuestro pueblo y que se encuentra cada sacerdote que pasa por nuestra parroquia. Más allá del símbolo religioso, es una riqueza cultural digna de admirar, dado su valor como piezas artísticas y por antigüedad, siendo algunas bicentenarias y otras mucho más antiguas.

Pasemos a explicar los elementos de un retablo de manera sencilla y seguro que, en vuestra próxima visita a la iglesia, lo veréis con otros ojos:


A parte de estos conceptos, cuando se describe un retablo se nos muestran las "hornacinas" (lugar ahuecado donde se colocan las imágenes religiosas) y a las "tablas" (pinturas o murales colocadas sobre el retablo con alguna escena alegórica a la imagen central o en consonancia con todo el retablo)

En la parte alta, un friso y cornisa (como antes de los tejados de las casas) suele separar el cuerpo del retablo del ático y para rematar el retablo suelen colocarse pináculos (figuras picudas), volutas (formas redondeadas o nubosa) o cresterías (salientes pequeños tipo crestas) .

Antes del banco suele haber un altar consagrado desde donde impartir la eucaristía y donde, curiosamente, suele encontrarse una reliquia de Santo que hace esta función.

Hoy os presento el retablo de la Virgen del Carmen o del Monte Carmelo, situado justo después del sagrario en la nave del Evangelio (izquierda) de nuestra parroquia. Parece ser que no fue  elaborado para colocarlo en este sitio precisamente y se piensa que pudo ser pensado para el interior del Convento de San Luis del Monte. Es de estilo barroco, sin policromar, sino que tiene solo color caoba.

En la hornacina central está la Virgen del Carmen con el niño. En este lugar estuvo situada la imagen de Ntra. Sra. de la Encarnación muchos años, ya que su ermita amenazaba ruina, hasta que fue restaurada.


Su historia cuenta que el profeta Elías vivía en una gruta del monte Carmelo, y que allí fue donde demostró el poder del Señor frente a los sacerdotes de Baal (Dios Hebreo), cuyo holocausto rechazó Dios. Inspirados por el profeta Elías, un grupo de ermitaños se fue a vivir a aquel monte y nació la advocación.

Fue el 16 de julio de 1251, cuando la imagen de la Virgen del Carmen se le aparece al superior general de la Orden de Nuestra Señora del Monte Carmelo (carmelitas), San Simón Stock, y le entrega un escapulario, prometiendo librar del castigo eterno a los que lo llevasen. 

También llamada Estrella del Mar (en latín Stella Maris), es patrona de los marineros. La devoción mariana hacia la Virgen del Carmen se extendió a muchos países de Europa, y por España y Portugal a Iberoamérica, a partir del siglo XVI.

Sobre la hornacina central, en el ático, hay una figura difícil de identificar porque carece de brazos y atributos, aunque parece ser un arcangel Gabriel o Rafael.
En las calles laterales se ven pequeñas figuras de dos religiosas que se identifican con Santa Teresa y Santa Teresita, con hábitos carmelitas.
En el mismo lugar hay dos pequeñas peanas con sendas imágenes de una inmaculada de bello rostro y un niño Jesús que las devotas suelen cambiar de vestimenta a lo largo del año.
Además, pueden admirarse en este lugar varias pinturas: Las mayores se corresponden con San Francisco de Padua y San Francisco de Asís; y las pequeñas son un San Sebastián y un San Fernando, patrón de Sevilla, arrodillado frente a la Virgen de los Reyes.

Como curiosidad, encontré entre mis fotos antiguas, un antiguo escapulario que solían llevar los hermanos de esta hermandad, con el símbolo de la Virgen del Monte Carmelo en una de sus caras.


domingo, 16 de julio de 2023

La publicidad de nuestros comercios: Así éramos hace 40 años

 Vemos carteles, revistas, anuncios, panfletos y nos parecen algo baladí, sin importancia, y con el paso del tiempo, nos damos cuenta que son testigo de los cambios, de la forma en que nos comportamos, de cómo pensamos y somos. En tan solo una década todo cambia muchísimo y más aún si nos remontamos cuarenta años atrás.

Las revistas de feria son buena muestra de ello y, si buscáis en este blog, veréis otras entradas llenas de sabor a comercio antiguo.

Hoy en vez de concentrarlas en un video he querido traéroslas una a una para que la recordéis mejor. Seguro que sabéis incluso donde estaba cada anunciante. Sin más, viajemos a los 80's:

Uno de los bancos desaparecidos, aún fusionándose con otros, ya no tenemos sucursal BBVA.
Sergio es un clásico entre nuestro comerciantes, de hecho se reconoció su trayectoria profesional a nivel institucional. Gran emprendedor, a parte de su propio negocio puso en marcha "TeleSergio", una cadena de televisión local cuando aún no existía la tele a la carta, ni muchas cadenas. Mucho menos internet. Fue grandioso, sobre todo para los peques de la casa.
Hablamos de Espinar y sus inventos en una entrada, pero cabe reseñar lo increíble de sus inventos: antena de radio para automóviles, crecepelo, aro magnético contra el cáncer...
Curiosa publicidad del Pub Tiffanys, ese nombre tan americano, en el lugar que hoy ocupa el bar "el trastero". Además se pueden ver a las personas que llevaban el bar, son Juan Manuel Rodríguez Diego Rodríguez y Antonio Rodríguez (Juan Manuel y Antonio eran los dueños y creadores) y clientes en la barra que son Juan Díaz y Mamen Román.

Caja rural se reservaba la página completa en la publicidad y patrocinaba eventos para la feria como conciertos con grupos que sonaban mucho en aquella época. Aún recuerdo algunos de ellos.
La propia imprenta de la revista se publicitaba. Fijaos lo curioso de sus aparatos "últimos modelos" para hacer sus modernos trabajos de impresión.





La publicidad de Mármoles Peñaflor. En ella es curioso apreciar al propio fotógrafo de la lápida y alguien más en la propia imagen. ¿Quién los identidad?

Algunos servicios que daban en Peñaflor alguna empresa de los alrededores.
Don Nino, estaba donde hoy se sitúa "El rincón de Murillo" con su inconfundible dibujo del Payaso, símbolo de fiesta y buen ambiente. Fueron buenos tiempos para los bares de copas, pubs y discotecas.

Bar Barco, regentado por Rafael Lopera y su mujer en la Avenida San Antonio, entre el Pub "el Pendingue" (antes de que existiera este) y el Disco Pub "La Cueva".

Otro de nuestros bares de copas clásicos "El Óvalo" donde hoy está el bar de Pedro Luis en el Llano.
Por aquella época creo que la cantina de la estación la regentaba la familia Membribes.

Se le llamaba el bar de los arcos por la forma de su porche en la terraza y el propio dueño no le importaba poner su apodo a su bar. Buena comida y bebida.
Aunque hoy en día ya no existe, todos recordamos aquel supermercado en calle San Pedro. Con la riada de 1989 su negocio fue muy afectado. Más aún recordaréis su supermercado Lázaro en lo que hoy es el super Don Market.
Otra de nuestras discotecas perdidas. Tuvo muchos nombres como el Relobo, el Golo, Sala Goa... Muchos tenemos recuerdos imborrables entre sus paredes.
Otro de nuestros negocios que fueron vanguardia y ahora son todo un clásico reconocido por todos. Gran labor de Cristóbal y su familia.
Igualmente los Carranza desarrollaron la herrería tradicional y la mecánica de vehículos y maquinaria, también como chapistas. Hoy siguen adelante sus hijos.

Todos lo conocemos como "El Molinero".

Hoy sigue existiendo su establecimiento y además ha puesto en marcha el Molino de la Vega. Todo el mundo lo conoce, además de por Francisco Cruz, como Francisquín Molina.

Tienda mítica de ropa y complementos que primero estuvo en la calle Largo para pasar a la Plazoleta/ P. de la Constitución.
Aquí era el tiempo del bar central que lo regentaba Espino.
Kiosko de toda la vida "donde todo el que llega es un amigo".
Aunque aquí siempre se le ha conocido como Pepe el de la máquina. Toda una vida en su trabajo sobre ella.


El bar de la piscina municipal, que hacía poco se había inaugurado, fue regentado por dos trabajadores incansables reconocidos por todos aún hoy Manolillo García y Manuel Mármol, conocidos más por sus motes "Chupa y Murga".
La última zapatería tradicional de arreglos de cualquier pieza de cuero y zapatos en general. Alonso, que era mi padrino, era habilidoso con las manos y curioso y esmerado. Aún recuerdo el olor de su pequeño local, frente a lo que hoy es la peluquería Sayca, en plena travesía.
Esteban era conocido sobre todo por la Cerveza el Águila, muy consumida por aquí, y el vino Divisa.
Hoy si hijo también posee un negocio de restauración, bebidas y comida.

domingo, 9 de julio de 2023

Los más peques de la casa

 Cuando seas padre, comerás huevo... Decía mi abuela, sabiamente. Y es que una vez que lo eres y lo sientes, descubres otra forma de ver la vida, otra forma de amar.

Los hijos, sobrinos y nietos son la fuerza vital de la familia, la alegría de cada casa y el impulso para que todos nosotros intentemos de mejores cada día.

Es indudable descubrir en ellos la herencia genética de padres y abuelos, en gestos, costumbres y detalles que seguro emocionarán a quienes les hacen recordar a ese familiar que quizá ya no está.

Recuerdo también formas de nombrar a los pequeños de la casa de forma cariñosa por todos. El menor de todos era "el chirriburri" y el Chiqui o el chico, palabra que se le queda como apodo aunque tenga 40 años y mida dos metros.

Si se criaba muy grueso y con mucho peso, mi abuela siempre decía que se estaba criando muy hermoso, muy lustroso o sencillamente "gordo despelotado" si el niño estaba "exagerado" de peso. 

Luego, cuando comenzábamos a andar, perdíamos esas "roscas" en las piernas y brazos y te convertías en "el canijo" o más aún en un "pocapringue".

El hermano/a mayor era el "chache/a" o "tate/a" y los abuelos como los padres, no tenían otro nombre para los pequeños, sino simplemente su honorífico vínculo.

Lo que me llamaba la atención en mi abuela es que, aunque yo siempre la tuteé, ella al hablar de algo que yo le dijese siempre contaba como si yo le hablase de usted. Eso era cosa de como ella hablaba a sus padres y abuelos. Igual que decir padre y madre en lugar de papá o mamá. Es cuestión de máximo respeto a costumbres de aquellos tiempos de posguerra.

Muchas mujeres, siendo aún casi unas niñas, se iban "a servir" a alguna casa donde hacían todas las tareas domésticas y, sobre todo, cuidaban de los niños de la casa. Este oficio que solía estar remunerado, era las 24 horas toda la semana excepto algún permiso que dieran los señores. Así que ellas eran prácticamente las madres de quienes criaban como suyos y muchos de ellos guardaron ese vínculo de por vida, mayor que el de sus propios padres biológicos.


Mi abuela se fue a servir a una casa en Andújar, lejos de Peñaflor y en pleno noviazgo con mi abuelo, así que no mucho tiempo después no soportaron la distancia y se comprometieron, dejando así aquel trabajo que aportaba dinero a su familia. Sobre estas líneas mi abuela Balbina en aquel trabajo con el niño al que cuidó en u cochecito y ella con la ropa blanca del servicio.

Antigua foto de una familia muy numerosa de Peñaflor por la calle Largo / Juan Carlos I un día de romería por los años 50's. A la izquierda parece poder verse el Bar Central y al fondo una de las carrozas adornadas con figuras de papel.

La típica fotografía de la escuela, posando con libro, mapa y globo terráqueo. Aquí tenemos a Paquita Sánchez, mujer de Antonio Linares en el curso 1947/ 48
La etapa de los estudios es dura para los pequeños y más aún por entonces, pero bonita en cuanto a descubrimientos y aprendizajes, expriencias de vida y amistades imborrabñes.

Foto de una de aquella hermanas apodadas "Las Capitanas" por ser hijas de un militar de dicho rango que vivió en un gran cortijo de Peñaflor. Se ve lo engalanado de su traje para esta estampa. Me encantan este tipo de fotos muy antiguas. Puede ser de los años 20's.

Muchísimos niños se arremolinaban por las calles del pueblo, sobre todo siu había algún evento reseñable. Aquí a la salida de una ceremonia en la iglesia de una boda, por la calle nueva a principios de los 60's. La Boda de "La Paloma". Foto de Antonio linares y Paquita Sánchez. ¿Conocéis quienes aparecen en ella? 

Momentos especiales para los más pequeños de la casa llegando las fiestas, como en esta fotografía de mis tíos mellizos Juan y Balbina parra Fernández en una navidad a principio a mediados de los 60's, con los trajes típicos de la época y guitarra y pandereta.

¡Aquellas sí que eran Navidades! Una gran mesa presidida por los abuelos y muchos tíos y primos en perfecta unión celebrando las fiestas. Y creíamos entonces que lo mejor estaba sobre el mantel... cuando estaba sobre las sillas. Aquí yo repiqueteando con la botella de Anís del Mono en el año 89 en Navidad en casa de mis abuelos Lorenzo y Balbina. Al fondo se ve a mi madre con mi hermana recién nacida y mi tía Balbina con el menor de sus hijos Borja Moreno Parra.

Aquí vemos a Francisco, Ana, a la derecha y el pequeño Manuel Genicio Muñoz "Patrana" en el carrito el año 1977 o 1978.

Entrañable estampa de romería de Pepe García "El Fontanero" y su mujer Conchi Osuna con sus hijos Desi y Conchi. El parecido de su hijo Desi con su padre, en la actualidad es increíble.



Aquí mi tía abuela Loli Fernández Danta orgullosa posando con sus dos pares de sobrinos mellizos, mis tíos Juan y Balbi y mis tías recién nacidas Ana y Loli Parra Fernández, los cuatro hermanos hijos de mis abuelos Balbina Fernández Danta y Lorenzo Parra Moreno.

Aquí el estamos mi madre y yo el día de corpus Christi de 1985 junto a unos de los altares que se colocan. Otra fiesta especial para los más pequeños de la casa. Aquí le encuentro mucho parecido a mi hijo menor conmigo.

Mis tíos abuelos Lorenzo Fernández Danta y su mujer Ani Martín junto a su hija Tere en un cochecito de bebé bastante precioso para la época. Se ve que fue durante una feria porque justo detrás puede verse el puesto de turrón. ¡Magnífica estampa!

Mi padre con sus hermanas pequeñas, las mellizas Loli y Ana Parra Fernández.

Los cumpleaños de los pequeños de la casa son todo un acontecimiento pues queremos vivir intensamente todos esos primeros momentos. Este es mi primer cumpleaños el 18 de febrero de 1986 con la clásica tarta de merengue y los aperitivos típicos de entonces. ¡Como aquellos, ningunos! 
¡Mi hijo Rodrigo se parece mucho a mí actualmente!

Mi madre, desde muy pequeña estuvo trabajando en el bar con Paqui Villarino y Manolillo García "el Chupa" y, además de limpiar mucho pescado y hacer grandes guisos para las grandes comidas que daban, también se ocupaba en parte de la casa de esta familia y de sus hijos, como bien recuerda tanto ella como estos hijos. Incluso en aquel bar fue donde conoció a mi padre y comenzaron su noviazgo. Una historia de vida tras la barra de un bar.

Pero centrándonos en el tema de los más pequeños, todos habéis tenido o habéis sido la hermana mayor que ha cuidado del resto, que ha ejercido de madre e, incluso, dejó los estudios por tener que hacer las tareas de la casa para tantas bocas como había en todas las casas por entonces. eso fue hasta que un día se casaba con su novio de toda la vida y los hermanos lloraban como si ya no la fuesen a ver jamás. ¡Seguro que habéis vivido está historia o la habéis escuchado alguna vez!

La familia Sepúlveda Sánchez: El padre Juan Sepúlveda, Baltasar a la izquierda, Paco a la derecha y en el medio la pequeña Sole, sobre el puentecillo que había sobre el arroyo que cruzaba "el llano", hoy abovedado bajo la carretera. Detrás se sitúa hoy el taller de “El Cansaillo”.

Mi madre, Juani Domínguez y Antonio García Sánchez en lo que hoy es la ubicación de Vegas de Almenara, antes el cortijo de “Las Teresas”.

Casi sin darnos cuenta, la sociedad nos educa para las labores asignadas e impuestas para cada sexo. A los niños se les regala camiones, balones, pistolas, motos de batería... y a las niñas cocinitas, muñecas, maquillaje...
Muy pronto, a corta edad, se les asignaba la ayuda en la crianza de sus hermanos y otros niños del entorno, cosa que a los niños varones, no.
Aquí la niña Soledad Sepúlveda sujeta el carro de Conchi García Osuna. a su lado su hermano Desiderio, junto con la abuela Concha y su madre Conchi Osuna por la carretera de Lora del río, a la salida oeste de Peñaflor.

Barrio de la Morería y zona del Castillo. Los niños de los 60's y 70's se arremolinaban en las calles. Madres, hijas y nietas salían al atardecer a la puerta de la calle en su sardineles y mecedoras.
En esta entrañable foto están:
Isabel (mujer de Triguero), Pepe Muñoz Muros, Antoñita García Cruz, Juan Bajo Largo, Sebastián García Cruz, Gertrudis Ortiz Melo (madre de Aurelina y Rafalín), la pequeña Aurelina muy rubia, la siguiente es prima de Pepe Muros, Abajo Mari Loli Bajo Largo (mujer de andrés Osuna), Oliva Muñoz Muros, Pepi (Carrasco), casi no se ve a Teresa (Madre de Pepi), la siguiente es una hermana de Sebastián García.
Agachados: Manolo "Clarito", __, Mari Trini Carrera, __.

Otra estampa típica eran las familias que iban andando a Almenara con la comida en cestas y bebida. Aquí la familia numerosa Domínguez Cruz: Mi abuela María Cruz Rodríguez con sus hijos Enrique, Manuel, Miguel, Conchi, Ana Mari y Juani a finales de los 60's.