Estamos ante un fenómeno ya pasado, cuando los trabajos del campo se hacía casi todos a mano, y con amplia mano de obra, que trabajaban de sol a sol y solo descansaban a la hora de comer y una pequeña siesta en las horas más calurosas de los veranos andaluces. Más tarde con la jornada de 8 horas, la forma de trabajar fue cambiando, al igual que al incorporar poco a poco transportes y maquinaria especializada. Aquí os dejo dos ejemplos: La recogida de maiz a mano y la recolección de remolacha en los campos de Peñaflor.
Era costumbre que los fotógrafos de la zona vagasen por las distintas fincas y parcelas del pueblo buscando las cuadrillas, esperando cualquier parada para hacer una foto y así buscarse también el pan.
Amplios sobreros y mangas largas las mujeres para soportar el intenso sol y la crudeza del maiz.
Arriba Fran Sánchez "Barba", Juan Peligro, Santiago León, Joselete Órtiz, Jose Mari "Palanca", Juan Iglesias. Abajo Ricardo "Cencerra", Antonio Franco "Franquillo" Juan Mármol "Murga", Pepe Cabrera y mi suegro Manuel Vizuete "El Coca".
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